Hacer tributo a Pink Floyd implica un peligro : decepcionar. Es un gran grupo (para mi, el más grande e influyente de la segunda mitad del siglo XX, y eso es mucho decir), y la grandilocuencia de su sonido característico se hace difícil de reproducir. Sobretodo con la legión de fans incondicionales del sonido de Gilmour y compañía, que tienen los discos tatuados en el cerebro. Pues bien, Crazy Diamond no decepcionaron en absoluto.
Con una Sala Bikini hasta la bandera, estos chicos de Barcelona dieron un repaso a la carrera de los Floyd en sus puntos más álgidos. Ejecutaron casi íntegro el Dark Side of the Moon, piezas del The Wall y Wish You Were Here, y un Astronomy Domine. Un repertorio parecido al que interpretaron en su momento el ya trío para la gira de PULSE. Momentos destacados : la voz de Victor emulando a Roger Waters en los cortes de The Wall, una grandísima The Great Gig In The Sky, que arrancó los aplausos del público sin dudar; y los bises, Wish You Were Here, que acabé cantando a grito pelado con gente que podrían ser mi padre (y que me encantó) y el detallazo de la bola de discoteca para Comfortably Numb (vean este video, señores).
Como no todo podía ser perfecto, Crazy Diamond flojean un pelín en la ejecución de los solos (sobretodo en Shine On You Crazy Diamond) y en la batería, pero alabo el trabajo sonoro del guitarrista, que clavó los sonidos de David Gilmour. Dejo el vídeo de Money en el Clon Festival, ¡y si alguien grabó el Great Gig en vídeo, que lo cuelgue en Youtube!
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