Aquí el disco que ha tenido la mala suerte de coincidir en el tiempo para estar en mi poder, con el de Sidonie, el cual no consigo dejar de escuchar. La verdad, es que este es un disco de los que no se hacen y menos en catalán, lo cual comporta un riesgo comercial salvaje, aunque debe generar en el grupo una satisfacción personal muy bonita, supongo.El disco es un compendio de todas sus influencias, vease The Kinks, The Divine Comedy, Love, The Beach Boys o Tindersticks y algunos ramalazos de los genios de La Nova Cançó, tan valorados últimamente.
Pere Agramunt y los suyos nos presentan unas canciones que no deberían pasar desapercibidas para todos aquellos que se enamoraron del Set Tota La Vida de Mishima, aunque tengan muy poco que ver, tal vez más cercanos por la atmósfera que son capaces de crear y por la utilización de unas letras inteligentes y para nada sonrojantes, la cual cosa no pueden decir demasiados.
Canciones súblimes, cómo la elegida como single, Una imatge més, con esas trompetas tan bien colocadas, al estilo de los Love o la divertida y saltimbanqui Com fulles mortes, hacen caer a sus pies a cualquiera con un mínimo buen gusto, hable el idioma que hable.
Además osan versionar el Famous de The Magnetic Fields y no hacen desastres en el intento, véase Si vull marxar, transformada de pop electrónico a folk suave y exquisito. Un disco para perderse en él.
¡OH! ¡Me encanta ese disco! "L'experiència és un nom" es la canción que más me gusta. Son geniales. A ver si alguna vez me acerco a esos lares y los veo en directo, que tengo muchísimas ganas, porque veo complicado que se acerquen ellos por aquí. jeje.
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