Supongo que entre la reciente parroquía que ha absorbido la música The Black Keys como propia, o sea, el indie más destroyer, este disco será un "zas en toda la boca", y posiblemente enfocado así es más entendible el aluvión de críticas recibidas por el momento.
Los que querían una continuación de El Camino ya se pueden ir por donde han venido, ya que aquí a no ser que empiecen por el final en que encontrarán Gotta Get Away, un blues rock efectivo y efectista a partes iguales, no tendrán donde agarrarse.
Personalmente no es lo que me esperaba, pero por suerte tampoco es un calco de lo anterior, por lo que merecen el más grande de mis respetos por no ir directamente a la pela, y además no es para nada malo lo que en el hallamos, nada más lejos...Y obviamente, la mano del co-productor Danger Mouse es más que evidente en la mayoría de los temas, para que así sea y para que los temas tengan ese punto de groove marca de la casa.
Fever, tema que nos avanzaron para abrir boca, engancha a medida de escuchas debido en parte al órgano farfisa que le da un plus de encanto; Bullet In The Brain (otra que apunta a single) viene armada con las dosis justas de épica y guitarras; o el sonido más tosco de It's Up To You Now, son razones más que apetecibles para degustar este trabajo con ganas y sobre todo sin prejuicios.
Probablemente diría que la mayoría de las restantes pegan en segundonas, algunas incluso bastante amuermadas, pero bueno, querían experimentar y no estancarse, y siendo sinceros, cualquier mierda que hagan Dan Auberbach y Patrick Carney seguro que es infinitamente mejor que el 99% de la discografía completa de U2, por poner ejemplos claros de bandas masivas.
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