Con Damon Albarn ha pasado algo extraño. Los mismos que en los 90 le daban de lo lindo por ser el cantante pijo y guapo de Blur, sea por sus credenciales hasta la fecha o no, ahora le encumbran. Y servidor no se puso ni en un bando antes, ni ahora se pone en el otro.
En reseñas previas sobre sus trabajos, siempre digo que espero que vuelva aunque sea a modo de divertimento a manejar de nuevo el sonido de Parklife, pero bueno, habrá que seguir esperando ese momento y nos crecerá la barba y se pondrá blanca por lo visto.
Todo muy atmosférico y tal, tirando de melancolía e incluso tristeza en canciones perfectas para bellos atardeceres como Hostiles; en la experimentación y clasicismo de Everyday Robots, con la que titula el disco; e incluso idas de tarro de menos de un minuto como es el caso de Parakeet.
Muy bien, vale, pero ¿donde quedan la influencia de Paul Weller o Ray Davies que nos enamoraba en los primeros discos de la banda madre?. No hay ni rastro de ello para mi desgracia, y mi gozo solo se sacia con Mr. Tembo, juguetona canción infantil en la que cuela hasta un coro gospel, eso si, una de mis canciones internacionales favoritas de lo que va de año.
Supongo que a veces la nostalgia me juega malas pasadas y que para muchos artistas es mejor casi enloquecer (véase el caso de Björk o Thom Yorke) y conectar con la crítica elitista que realmente gustar al público, pero cuidado, que no digo con eso que no esté a favor de la experimentación de nadie, sinó que mi teoría es que los experimentos mejor con gaseosa. En fin, déjenme divagando y ni caso...
Damon Albarn - Mr Tembo on MUZU.TV.
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