Un grupo como este que no ha entrado en polémicas de ningún tipo, donde no hay ningún hermano cejijunto con el que pelearse, salvo a ser bastante ninguneado por crítica y público, siguen a su bola, entregando temazos espectaculares, como siempre, como de costumbre y a quien no le guste, pues que no oiga, ¡oigan!.
En el Vol.1 encontramos la fuerza acostumbrada, vease Arcadia; Ichiban (casi un plagio de Jet), o el pepinazo Gallows Hill. También hay algunos coqueteos con la electrónica como es el caso de True Love 1980, dónde suenan un mucho a los New Order de los buenos tiempos, o en la adhesiva Space Shot. En resumen, cancionacas por un tubo.
En el Vol.2, rizan el rizo y superando en cuanto a hits al primero, nos dejan boquiabiertos de su espléndido estado de forma.
Servidor se considera incapaz de resistirse a temas como Mind Control; el single Carnal Love, con un video-clip un poco espeluznante; Physical Love, que me recuerda sanamente a Weezer; el cañonazo Embers, que nos transporta a su primera época; la épica de There is hope again, la cual si hubiera sido hecha por Muse, seguramente hubiera corrido otra suerte, o la hermosamente acústica Change your name.
Servidor se considera incapaz de resistirse a temas como Mind Control; el single Carnal Love, con un video-clip un poco espeluznante; Physical Love, que me recuerda sanamente a Weezer; el cañonazo Embers, que nos transporta a su primera época; la épica de There is hope again, la cual si hubiera sido hecha por Muse, seguramente hubiera corrido otra suerte, o la hermosamente acústica Change your name.
Espero que haya Ash por muchos años y que viva para disfrutarlos, y a poder ser, alguna de esas veces en directo, sin agobios y con una palancana para las babas. Tal vez me encanta haberles visto crecer y que sigan tan estupendos y jovenes como de costumbre...como siempre.
Todo un descubrimiento. Me los llevo para casa. Gracias.
ResponderEliminarUn placer Victor :)
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