Los domingos sin noche de ronda anterior, son altamente productivos para quién escribe estas líneas, ya qus si sumamos lo de levantarse a la hora que supuestamente me acostaría, le sumas el cortadito y la lectura de periódicos varios en la cafeteria de la c/ Mayor, el resto es un no parar de devorar música cual antropófago, incluso más de lo acostumbrado, que en mi caso ya es mucho.El que nos ocupa, desde que lo descubrí hace escasos días, no ha dejado de sonar en mi humilde morada, ya que aparte que proporciona un chute de energía y buen rollo, se nota que es un trabajo hecho con buen gusto, y que he imaginado transportado al directo infinidad de veces a cada reproducción.
El segundo disco de Gabby Young , es una acumulación de virtudes tanto musicales como sobre todo vocales, ya que este señorita tiene en su currículum el ser la miembro más joven en ser aceptada en el National Youth Choir, a la temprana edad de 12 años.
Canciones como el single In Your Head, una loca fanfarria más propia de los años de Al Capone que de ahora, enamoran a la primera escucha; tres cuartos de lo mismo diría de Goldfish Bowl o de Horatio, canciones con una instrumentación poco habitual en esto del pop independiente, como al acordeón, las trompetas (inmensas) y los encantadores recursos jazzies que nos cuela casi sin querer.
También hay espacio para baladas emocionantes en que además muestra el poder de su garganta, sería el caso de la preciosa Honey; la intensa y épica Segment; o ese vals camuflado que es The Answer's In The Question.
Este The Band Callet Out For More, está cargado de interesantes quiebras de cintura, de talento y de canciones para superar con éxito el paso del tiempo. Espero que así sea, por lo pronto, voy a seguir viviéndolo en presente.
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