Lo comenté no hace demasiado tras ver uno de sus directos, que estamos ante una de las más firmes promesas o mejor dicho, realidades, de nuestra música independiente.
Con su primer trabajo discógrafico de título homónimo nos confirman las esperanzas depositadas y consiguen un material que no desentona en ningún momento, que repito, me transporta por empatía al Super 8 de nuestros "granaínos" más ilustres.
Noise-pop a base de reverb, distorsión y estribillos redondos como los de Ya no existes; el single Cuando nadie pone un disco; Ahora sabes (una de mis debilidades); o ese pepinazo que es Don de Traci, lamentablemente no descubierta por Pitchfork o NME, o la maravillosa Enséñame, que deberían reportarles muchas alegrías y bueno, con ello réditos, digo yo...
Los influencias envidentes de Jesus & Mary Chains, Los Planetas e incluso Surfin' Bichos, solo pueden servirnos para confiar en el gusto y evidenciar el obvio talento de estos chicos para crear himnos como hacen y como hicieron los anteriormente nombrados. Mi deseo es que se hinchen a hacer conciertos, a ver si por una de esas casualidades puedo repetir.
Odiar París por lo visto es un arma cargada de futuro. A mi me ha sabido a poco y quiero más, ¿algún EP a la vista? jejejeje.
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