Seguramente no sonaré exagerado si digo que el primer LP de estos chicos es la banda sonora del verano 2010 para muchos, y es que los de Brooklyn han conseguido hacer un disco a la altura de lo que nos advertían en el ep Summertime, frescura, descaro y diversión a partes iguales.
Parece que no tienen intención ninguna de trascender, ni de ser los más raros y los más listos del barrio, solo quieren estar, divertir e ir a lo suyo, o al menos eso me parece a mí.
Si ya sabíamos que Let's go surfing era la monda lironda, aqui nos regalan otro surtido de inmediatez y de buen pop atemporal, con un bajo que recuerda tanto al de Simon Gallup en los mejores tiempos de The Cure, como al de Peter Hook de New Order.
En el caso primero no hay más que escuchar Me and the Moon, donde solo falta el lamento de Robert Smith, The Future o la atmoférica Instruct Me. En el segundo caso I need fun in my life o Best Friend serían un buen ejemplo para comparar con las canciones de los mancunianos.
El hit inédito que nos regalan como primer single, Forever And Ever Amen, contiene todos los ingredientes nombrados anteriormente, y unos coros 50's, utilizados al estilo de The Pixies o The Raveonettes, sonando actuales como nadie. Siguiendo en este apartado, los coros surferos a lo The Beach Boys también abundan, cosa que le da un plus a servidor para que lleguen antes a mi corazoncito, veamos sinó We tried o Skippin' Town.
Tampoco me gustaría olvidarme de un temón como es Book of Stories, anclado en la mejor tradición pop inglesa y que nos suena a muchos y a nadie al mismo tiempo, cosa terriblemente atractiva.
No sé si serán un producto del tiempo, o si por el contrario tendrán una larga y fructífera carrera, pero esta es la actitud, y eso solo les puede reportar cosas buenas. De momento el mundo está en sus manos.