La banda sonora de la primera parte tuvo dos puntos a su favor, que le iba como anillo al dedo a las imágenes, y que les pilló en plena popularidad de lo que se hizo llamar brit-pop, lo que todo unido hicieron que fuera casi tan mítica como el film.
A falta de ver la película que nos ocupa, la elección del tracklist me chirría bastante, ya que de entrada nos encontramos que a modo de remix los pesados de The Prodigy se cargan el Lust For Life de Iggy Pop; que usan canciones demasiado manoseadas como el Relax de Frankie Goes To Hollywood; It's Like That de Run DMC & Jason Nevins; y rizando el rizo de lo "sobao", Radio Ga Ga de Queen.
Con esos precedentes, toca agarrarse a las canciones de Wolf Alice, que con Silk consiguen la más inspirada de la terna; el Dreaming de Blondie; o a Whitest Boy On The Beach de Fat White Family, con una línea de bajo totalmente hipnótica, y que espero que al sumarse a las imágenes ganan en magnitud.
Se rubrica esta compilación con Slow Slippy de Underworld, canción que pretende ser el reverso de la ya clásica Born Slippy (y a la que por cierto no llega ni por asomo a la suela del zapato en nada) que se incluía en la primera película y que ha resisitido lozana el paso del tiempo. Espero no quedarme igual cuando vea el retorno de Renton y sus secuaces en pantalla.
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